Santísima Trinidad

Ciclo y fecha
Cicle: 
A
Temps: 
Tiempo ordinario
Data : 
Domingo, 4 Junio 2023
Dios nuestro, estamos abiertos a recibir tu amor

Dios nuestro, te damos gracias
porque no has querido quedarte en las alturas,
sino que has venido
al encuentro de la humanidad
a quien tanto amas y quieres que sea feliz.

Te damos gracias porque Jesús, tu Hijo,
se ha hecho nuestro hermano y porque en él
toda la humanidad es también familia tuya.

Él también nos ha dado a conocer tu rostro
de Padre misericordioso, cuya alegría es
amar sin medida y acoger en su casa
a cada uno de sus hijos e hijas.

Te damos gracias porque por el mismo Espíritu
que llenaba el corazón de Jesús
está en nosotros, habita en cada ser humano
y llena el universo
haciéndonos buscar la paz y la fraternidad.

Te damos gracias porque nos haces comprender
que salir de nosotros mismos nos hace bien,
nos dignifica y nos hace crecer como personas
y cuanto más capaces somos de entregarnos,
más abiertos estamos a recibir tu amor.

Haz que, como Moisés, sepamos cada mañana
«subir al monte» para escucharte,
para estar contigo, y llevar a nuestros hermanos
la alegría de haberte encontrado
y los horizontes que abres a nuestra existencia.

Que, como Nicodemo, sepamos buscar a Jesús,
aunque sea de noche en nuestro interior,
para que él ilumine nuestro camino.

No dejes que nos condenemos nosotros mismos
a una vida triste o sin esperanza,
fruto de prescindir de ti y de encerrarnos
en nuestro egoísmo estéril.

"La Misa de cada día", de la Editorial Claret
Danos la fuerza de tu Espíritu para que seamos mensajeros de tu evangelio

Señor, sentimos vergüenza
de confesarnos cristianos.
Tememos el ridículo y la incomprensión.
Danos la fuerza de tu Espíritu
para que seamos mensajeros
de tu evangelio.

Señor, que el don de inteligencia
agudice nuestra mirada para saberte ver
en las circunstancias que nos tocan vivir
y en las personas
con las que nos relacionamos.

Que el don de consejo acompañe
a las personas que tienen autoridad
para que en sus decisiones
ayuden a los más necesitados
y a cuantos ven mermada
su capacidad de decisión.

Haznos fuertes, Señor,
para actuar con decisión
y saber decir y hacer
sin dejarnos llevar por la agresividad.

Que la piedad
limpie nuestro corazón, Señor,
y haga desaparecer la amargura,
la cólera, la impaciencia,
y las transforme en sentimientos
de comprensión, de tolerancia y de perdón.

Señor, que el tiempo de Pascua
que hoy termina sea un impulso
que nos haga vivir con alegría
el día a día de la vida ordinaria. 

"La Misa de cada día", de la Editorial Claret
Dios Padre, Hijo y Espíritu

El mundo está lleno de misterios.
El origen y la evolución del universo,
con las leyes físicas que lo rigen
y configuran un orden y belleza admirables.

Los sentimientos y la historia que se revelan
en cada rostro humano:
la chica guapa que sonríe, la abuela que suspira,
el hombre que hace una mueca.
El misterio de las personas 
con quienes convivimos
y que nunca llegaremos a entender del todo.

El misterio que soy yo mismo para mí,
que no hago y siento lo que quiero
sino, a menudo, lo que no quiero.

No hay misterio más insondable
que el misterio de Dios.
No porque sea complicado y oscuro,
sino porque su claridad y sencillez
son tan diáfanas que nuestros sentidos
no pueden llegar a captarlas.

Dios Padre, Hijo y Espíritu,
Dios fundamento, comunicación,
corriente eterna de amor,
más íntimo a mí que yo mismo.

"La Misa de cada día", de la Editorial Claret
Te bendecimos y te alabamos

Te bendecimos,
Trinidad Santa,
por todo el amor que has derramado
en el corazón de cada uno de nosotros.

Te bendecimos,
Padre,
porque nos has llamado a la vida:
Ya que nos has hecho a tu imagen,
ayúdanos a hacernos semejantes a ti.

Te bendecimos
Hijo de Dios,
porque te has hecho uno de nosotros,
y por amor nuestro has dado la vida.
Te bendecimos porque – resucitado –
eres nuestro compañero de camino:
haz que nos dejemos guiar por tu Luz,
y vivamos en comunión con tu Vida.

Te bendecimos,
Espíritu de Amor,
porque, junto con el Padre y el Hijo,
haces morada en nuestros corazones,
porque nos recuerdas y haces entender
las palabras de amor
que en nombre de Dios Jesús nos dirigió.
¡Cólmanos de todos tus dones!

"La Misa de cada día", de la Editorial Claret
Celebramos el amor de Dios

Hoy celebramos el amor de Dios.
Nos cuesta entender la grandeza del amor
y por eso lo llamamos misterio.
Señor, ábrenos los ojos
para que veamos lo que hoy celebramos,
en las familias que se quieren
y en las personas
que dan su vida por los demás.

El Padre trasciende todo, nos conoce
antes de ser engendrados en el seno materno,
nos anima y acompaña
con la Palabra, que es su Hijo
y hace posible que nos sintamos hijos,
porque nos ama con todo el ardor del Espíritu.
Gracias, Señor.

Gracias, Señor, por la diversidad
de dones y capacidades,
todos son obra de tu amor.
La manera de vivir y trabajar
también es diversa,
pero todos trabajamos por un mundo mejor.
Cada uno de nosotros
piensa y actúa a su manera.
Esta riqueza es obra de tu generosidad.

La tu gracia y tu paz, Señor,
esté siempre con nosotros.
Que sintamos el amor de Dios
y el Espíritu nos una y nos haga solidarios. 

"La Misa de cada día", de la Editorial Claret
Vivir en la oración la presencia de la Trinidad

Padre creador, te damos las gracias
por todo lo que existe.
Nos has regalado los astros del cielo,
la Tierra y todo lo que habita,
y, sobre todo, la familia humana.

Te pedimos saber cuidar tu legado,
que no nos aprovechemos de lo que Tú nos das,
sino que lo acojamos como un regalo.
Haznos generosos como Tú lo eres.

Jesús, gracias por enseñarnos
a confiar en el Padre,
por revelarnos su amor,
por mostrarnos cómo es,
por hacernos sentir su proximidad.
Gracias por darnos tu vida,
por enseñarnos a amar sin límites.

Espíritu Santo, infunde en nosotros la fuerza
para ser fieles a los designios del Padre,
para entender las palabras del Hijo,
para respetar la Creación,
para amar a nuestros hermanos,
para cuidar a los más necesitados
y para vivir en la oración
la presencia de la ¨Trinidad.

"La Misa de cada día", de la Editorial Claret