Celebración patronal en la parroquia Claret de Lleida

Coincidiendo con el día del DOMUND –jornada misionera– la parroquia Claret de Lleida ha celebrado la fiesta de su patrón, san Antonio M. Claret. La celebración ha tenido lugar hoy domingo, 24 de octubre, fiesta litúrgica del santo, en una eucaristía presidida por el obispo Salvador, concelebrada por los claretianos de la comunidad leridana, y la participación de un gran número de fieles, dado que ya no hay restricciones de aforo.

Al comienzo de la liturgia el Sr. Obispo ha manifestado su alegría de participar, respondiendo a la invitación de la parroquia, porque es una oportunidad de encontrarse con esta comunidad cristiana y conocer de cerca las personas que la forman. Y ha invitado a todos a pedir la intercesión del P. Claret para que les ayude a encontrarse con Cristo.

En la homilía Mons. Giménez ha evocado la figura del P. Claret, diciendo que cumplió lo que decían las lecturas que se han proclamado en la liturgia de la Palabra: predicar que el Reino de Dios está cerca, que Jesucristo es nuestro Salvador, y que hay que vivir siguiendo sus enseñanzas. En cuanto al DOMUND, ha recordado que hoy se debe orar especialmente por los misioneros. Y ha hecho una mención especial a los claretianos que están por todo el mundo llevando la Palabra de Dios. El Sr. Obispo ha aprovechado la ocasión de la fiesta para pedir vocaciones claretianas, sacerdotales, a la vida consagrada, etc.

Durante la celebración se ha hecho memoria de algunos aspectos de la vida del P. Claret: el pañuelo de fardo, para significar los desplazamientos en su tarea evangelizadora; un ejemplar del Nuevo Testamento, como símbolo de sus predicaciones; y una cesta de plantas medicinales para hacer hincapié en la faceta ecologista y curativa de Mn. Claret, que él mismo explica en el capítulo VIII de su autobiografía "Cuando fui enviado a la parroquia de Viladrau, visitaba los enfermos cada día. Por razones políticas no había médico en el pueblo. Tuve que hacer de médico corporal y espiritual. Aprendí el uso de las hierbas medicinales, con el que curaba a los enfermos ".

Los catequistas y niños y niñas que se preparan en la catequesis familiar para recibir la Primera Comunión, han recibido la felicitación del obispo Salvador. Los primeros, por la tarea evangelizadora que hacen cada semana, y los niños por su deseo de conocer y seguir a Jesús.

Como ya es costumbre, la celebración ha finalizado rezando todos juntos la oración apostólica del P. Claret: "¡Oh Dios y Padre mío !, haz que te conozca y te haga conocer; que te ame y te haga amar; que te sirva y te haga servir; que te alabe y te haga alabar de todas las criaturas ", y cantando con voz ferviente el himno al santo.

A la salida se ha entregado a los asistentes una estampa y unas hojas de laurel para recordar la función sanadora del P. Claret.

Conxita López Torres